Mihail Petrov, Teodora Sakelarova, Nikolay Velinov, Ivan Martinov, Nikolay Gabrovsky
Introducción: La fenestración de la arteria carótida interna (ACI) es una variación anatómica congénita extremadamente rara. Aún más infrecuente es la presencia concomitante de otra patología vascular: un aneurisma cerebral ipsilateral, una malformación arteriovenosa ipsilateral.
Pregunta de investigación: Presentamos un caso clínico de un paciente con una fenestración de la arteria carótida interna derecha con aneurisma asociado, tratado con un stent desviador de flujo Pipeline y una malformación cavernosa ipsilateral resecada. Hasta donde sabemos, este es el primer caso reportado con esta constelación.
Materiales y métodos: Paciente masculino de 44 años de edad que presentó una crisis epiléptica generalizada. La resonancia magnética reveló una malformación cavernosa frontal derecha. La angiografía por sustracción digital (ASD) realizada mostró una fenestración de la arteria carótida interna derecha y un aneurisma asociado.
Resultados: En un primer tiempo se realizó resección del MC. Se inició doble antiagregación plaquetaria en el postoperatorio. En un segundo tiempo se insertó un stent desviador de flujo Pipeline en la ACI derecha, cubriendo el segmento fenestrado y el aneurisma asociado.
Discusión y conclusión: La presencia de malformaciones vasculares cerebrales (MAV, MC) y un aneurisma asociado en el segmento fenestrado de la ACI debe plantear la discusión sobre qué tratar primero y cómo. En nuestro caso, debido a la necesidad de terapia antiplaquetaria para la implantación de un stent desviador de flujo, se operó primero el MC. En fenestraciones de la ACI con aneurisma asociado con un canal arterial dominante, la implantación de un stent desviador de flujo es un método elegante para eliminar el aneurisma de la circulación y restaurar la hemodinámica en el segmento arterial afectado.