Frederic Parahy*, Lluis S Soler, Paul Tramini, Angel E Gomez
Objetivo: Investigar el impacto de diferentes tratamientos utilizados para desintoxicar los implantes dentales sobre la rugosidad y la composición química de la capa de óxido de titanio (TiO2) y cómo estos cambios pueden afectar la reosteointegración de un implante.
Materiales y métodos: 25 discos de titanio (Ti6Al4V) recubiertos con un tratamiento de superficie SAE (Sandblasting y Acidetching) fueron sometidos a una serie de tratamientos mecánicos y químicos simulando la descontaminación de la superficie del implante dental afectado por periimplantitis. La morfología y la rugosidad (principalmente Sa, Sq, Sku, Ssk, Sdr%) de la capa superficial se investigaron con microscopio electrónico de barrido (SEM) e interferómetro confocal respectivamente, mientras que la composición química se analizó con espectroscopia fotoelectrónica de rayos X (XPS). Todas las muestras fueron analizadas antes y después del tratamiento. Los tratamientos químicos y mecánicos empleados para la desintoxicación de la superficie del implante incluyeron clorhidrato de tetraciclina (TC), fototerapia junto con gel de azul de toluidina (L), aire en polvo (OH) y dispositivo ultrasónico (US). Se utilizaron 5 discos para cada grupo de tratamiento.
Resultados: El tratamiento US deslamina la capa de óxido de titanio (TiO2), disminuyendo la rugosidad, principalmente por aplastamiento de los picos más altos de la capa superficial, dejando la capa de TiO2 con una rugosidad similar a una superficie torneada y mecanizada. El tratamiento TC no se elimina completamente con la irrigación con suero fisiológico y permanece en la profundidad de los valles de la superficie. El resultado de esta deposición se traduce en una disminución de los parámetros de rugosidad en general. El pulido con chorro de bicarbonato de aire en polvo OH deja una rugosidad similar pero también deja restos de polvo en la superficie. La fototerapia en conjunción con azul de toluidina mejora la exposición de la superficie modificando la complejidad de la textura y, por lo tanto, aumenta la rugosidad.
Conclusión: Para lograr la re-osteointegración de un implante afectado por periimplantitis, el tratamiento de descontaminación debe dejar al menos una superficie similar a la del tratamiento original de la superficie SAE. En términos de parámetros de rugosidad, este estudio muestra que el tratamiento de fototerapia no solo tiene parámetros de rugosidad similares en comparación con la superficie original, sino que también mejora la complejidad de la textura de la superficie, lo que puede mejorar las posibilidades de re-osteointegración.