Bizunesh Kefale*, Dechasa Bedada, Yasin Negash, Gizachew Gobebo
Antecedentes: La diarrea es un importante problema de salud y la causa más común de enfermedad y la segunda causa principal de muerte infantil en el mundo. Se estima que cada año se producen en todo el mundo 2.000 millones de casos de enfermedad diarreica y 1,9 millones de niños menores de 5 años, principalmente en países en desarrollo, mueren a causa de ella. La mayor incidencia de la diarrea se da en el mundo en desarrollo, incluida Etiopía.
Objetivo: Este estudio se realizó para identificar los determinantes influyentes de la enfermedad diarreica entre niños menores de cinco años en el Hospital General de Kuyu, Zona Shoa del Norte, Región de Oromia, Etiopía.
Métodos: Se realizó un estudio transversal retrospectivo en niños menores de cinco años que fueron hospitalizados con diarrea en el Hospital General Kuyu desde septiembre de 2015 hasta agosto de 2018. Se incluyó en el estudio a un total de 612 niños menores de cinco años. Los métodos estadísticos de análisis de datos utilizados fueron el modelo lineal generalizado bayesiano y los modelos de regresión semiparamétrica bayesiana y la inferencia se realizó con base en la verosimilitud penalizada.
Resultados: Entre 612 niños menores de cinco años incluidos en este estudio, 503 (82,2%) de ellos tenían diarrea. El modelo de regresión semiparamétrica con enfoque bayesiano resultó ser el mejor modelo para ajustar los datos. El estudio reveló que los niños que residen en áreas rurales, los niños con bajo peso para la altura, los niños con retraso del crecimiento, los niños que nunca fueron vacunados, los niños que no fueron amamantados, los niños de hogares sin instalaciones sanitarias y los niños de madres que utilizan una fuente de agua potable sin protección se asociaron significativamente con un mayor riesgo de diarrea infantil.
Conclusión: El modelo de regresión semiparamétrica bayesiana se ajustó a los datos mejor que los otros. El estudio sugiere que el suministro de agua potable de mejor calidad, la ampliación del programa de vacunación y la iniciación en la adopción de la cultura de la lactancia materna de los niños reducen el riesgo de diarrea entre los niños menores de cinco años en el área de estudio.