Martha Lydia Salgado-Siclán, Reyna Rojas-Martínez, Emma Zavaleta-Mejía, Daniel Ochoa-Martínez, Juan Burgueño-Ferreira, Beatriz Xoconostle-Cázares y Roberto Ruiz-Medrano
La respuesta de defensa de las plantas implica grandes cambios en la expresión génica. Se conocen varios inductores implicados en dicha inducción, incluidos compuestos endógenos de bajo peso molecular, así como aquellos derivados del patógeno, como fragmentos de membrana y pared celular y metabolitos secundarios. El ácido salicílico y el peróxido de hidrógeno son inductores bien conocidos de la respuesta al ataque del patógeno, y compuestos sintéticos análogos a algunos de estos inductores de resistencia muestran efectos similares. Se ha demostrado que los fertilizantes foliares, además del efecto beneficioso sobre el crecimiento de las plantas, en algunos patosistemas limitan la infección por patógenos, particularmente durante las fitoplasmosis. Sin embargo, sus modos de acción en estos casos son poco conocidos. Con el fin de comprender mejor los mecanismos a través de los cuales estas mezclas complejas pueden inducir la respuesta de defensa,
se analizó el efecto de uno de estos fertilizantes foliares, NPKoligosaccharin (conocido como KendalTM), sobre la acumulación de transcritos relacionados con la defensa en plantas de Arabidopsis tanto inoculadas con placebo como infectadas con el virus del mosaico del nabo. Solo se observó una inducción moderada en el caso de las proteínas relacionadas con la patogénesis (PR1) para la NPK-oligosacarina. Por otro lado, la infección viral más esta mezcla indujo PR1, MPK1 y TGA1 de manera más efectiva que la mezcla sola. Sin embargo, solo el tratamiento con peróxido disminuyó los niveles de virus; en contraste, se observaron niveles más altos en las plantas tratadas con NPK-oligosacarina. Las imágenes confocales de TuMV marcado con GFP respaldan esta observación. Nuestros resultados sugieren que el tratamiento con fertilizantes foliares puede no ser efectivo contra ciertos patógenos.