Cuny P, Benmiloud S, Oliary J, Dillinger JG, Sideris G, Henry P y Manzo-Silberman S*
Asociada a la intervención coronaria percutánea primaria (pPCI), la farmacoterapia en pacientes con infarto agudo de miocardio con elevación del segmento ST (STEMI) ha transformado el manejo de la fase aguda. El uso de inhibidores de la glucoproteína IIb/IIIa (GPI) sigue siendo discutible, el nivel de las guías se ha modificado en las sucesivas ediciones de las guías. En las últimas guías de la Sociedad Europea de Cardiología, los GPI tienen un nivel IIb B en uso previo y IIa C en rescate durante el procedimiento pPCI. Ante las diferentes recomendaciones, analizamos las características clínicas de los pacientes con infarto agudo de miocardio con elevación del segmento ST según el uso de GPI. Evaluamos las complicaciones durante la hospitalización, en particular los eventos hemorrágicos. También analizamos el coste del manejo de los pacientes.
Realizamos un estudio retrospectivo, descriptivo y monocéntrico desde enero de 2010 a diciembre de 2012 incluyendo todos los pacientes consecutivos con STEMI con síntomas de evolución de menos de 12 horas tratados mediante pPCI.
Los inhibidores de la proteasa se administraron según lo recomendado en pacientes con alto riesgo trombótico, bajo riesgo de sangrado, con presentación temprana y con mayor probabilidad de localización anterior. A pesar de una presentación clínica inicial más grave, no se observó diferencia estadística entre cada grupo en cuanto a complicaciones intrahospitalarias y duración de la estancia hospitalaria. No obstante, los pacientes tratados con abciximab tienen un costo de tratamiento general significativamente mayor en comparación con HNF solo (+30%) u otros inhibidores de la proteasa (+37%). En indicaciones clínicas seleccionadas, de acuerdo con las pautas europeas, el uso de inhibidores de la proteasa parece seguro, eficiente y rentable con respecto a eptifibatide/tirofiban.