Abstracto

Plaquetas, microambiente y carcinoma hepatocelular

Yeliz Yilmaz, Esra Erdal, Nese Atabey y Brian I. Carr

El carcinoma hepatocelular (CHC) es el tipo más común de cáncer de hígado y tiene una alta tasa de mortalidad. Actualmente, las opciones de tratamiento son limitadas y se necesitan urgentemente nuevas terapias. Las plaquetas son células pequeñas enucleadas, derivadas de megacariocitos maduros y, además de su papel en la trombosis, participan activamente en la carcinogénesis y la metástasis. El número de plaquetas en la sangre está asociado con la progresión de la enfermedad, la supervivencia general y la subagrupación del CHC. Tanto la trombocitosis como la trombocitopenia están asociadas con el fenotipo y el tamaño del CHC, relacionados con otros factores como los antecedentes de cirrosis. El recuento de plaquetas y también la relación plaquetas-linfocitos (PLR) y la relación neutrófilos-linfocito (NLR) se tienen en cuenta en la toma de decisiones en el manejo. Dado que las plaquetas también absorben nucleótidos y citocinas de las células tumorales, aislar y estudiar las plaquetas podría proporcionar información valiosa para comprender las células tumorales y puede ayudar a desarrollar un tratamiento personalizado. Los anticoagulantes y los agentes antiplaquetarios son terapias potenciales contra el cáncer de uso común, que también se están estudiando para el tratamiento del CHC. Por lo tanto, las plaquetas son un aspecto de un entorno microambiental complejo que afecta la biología del CHC y otros tumores.

Descargo de responsabilidad: este resumen se tradujo utilizando herramientas de inteligencia artificial y aún no ha sido revisado ni verificado