Jeff R. Martin y Heimo Mikkola
Durante el Mesolítico, Gran Bretaña formaba parte de Europa gracias a la existencia de un importante puente terrestre, conocido como Doggerland. Esto puede explicar la amplia variedad de coloraciones del plumaje y diferencias físicas del cárabo común que hemos encontrado en los museos cuyos condados bordean el Mar del Norte, es decir, Norfolk, Suffolk y Essex. En este artículo, anticipamos que la composición genética de los cárabos comunes en Gran Bretaña es más compleja de lo que se conoce actualmente. Se requieren más investigaciones filogenéticas y de vocalización sobre este tema.