Ivonne Figueroa-González, Alma Cruz-Guerrero y Guillermo Quijano
Hoy en día, está bien establecido que existe una fuerte relación entre la dieta y la salud. El concepto de utilizar microorganismos probióticos para prevenir y tratar una variedad de enfermedades humanas se ha utilizado durante más de 100 años. Recientemente, ha habido un aumento en la investigación de probióticos que ha llevado a avances significativos en nuestro conocimiento de esos microorganismos. La importancia de los probióticos es significativa porque tienen tanto una aplicación en el desarrollo de productos industriales como un efecto beneficioso en la salud humana. En este sentido, los microorganismos probióticos se han agregado ampliamente a yogures y otras leches fermentadas, que son productos líderes de alimentos funcionales que comprenden aproximadamente el 65% del mercado mundial de alimentos funcionales. El modo de acción de los microorganismos probióticos es probable que sea multifactorial y parece ser específico para cada cepa. Al modificar la microbiota intestinal, los probióticos influyen directa o indirectamente en el estado de salud al proporcionar productos finales de la fermentación anaeróbica, como vitaminas, ácidos de cadena corta y bacteriocinas, que brindan protección contra microorganismos entéricos. Asimismo, los probióticos influyen en la respuesta inmune local y sistémica, mejoran los síntomas de intolerancia a la lactosa, estimulan la eliminación de toxinas y tienen otros efectos beneficiosos que no están mediados por la microbiota intestinal. En este trabajo se revisan y discuten los beneficios que aportan a la salud humana los microorganismos probióticos, así como los mecanismos que potencialmente emplean.