Kevin J. French y Kendall S. Frazier
La familia del factor de crecimiento endotelial vascular (VEGF) y sus receptores asociados son componentes críticos de la angiogénesis, el proceso de formación de nuevos vasos sanguíneos. En condiciones normales, la angiogénesis apoya el desarrollo del organismo y la homeostasis tisular de una manera estrictamente controlada. Sin embargo, en el microambiente tumoral, varias condiciones, como la hipoxia y la expresión descontrolada del factor de crecimiento, pueden conducir a la angiogénesis tumoral, lo que permite la proliferación endotelial y el ensamblaje de los vasos, que apoyan el crecimiento del cáncer. La angiogénesis tumoral no solo permite la proliferación tumoral, sino que su desequilibrio de reguladores causa una estructura vascular anormal, que puede aumentar la quimiorresistencia durante la terapia. La linfangiogénesis, o la angiogénesis impulsada por metástasis en el sistema linfático, se ha identificado recientemente como un proceso esencial para la propagación del tumor a los ganglios linfáticos y está impulsada por miembros únicos de la familia de vías de señalización del VEGF. La inhibición de la angiogénesis tumoral como estrategia terapéutica contra el cáncer ha dado lugar al desarrollo de varios fármacos aprobados recientemente, lamentablemente acompañados de problemas de seguridad relacionados con la angiogénesis y de responsabilidades asociadas a efectos no deseados propios de cada perfil de fármaco individual. Esta revisión resume el papel de las familias VEGF y VEGFR en la biología tumoral y las terapias disponibles que se dirigen a estas vías angiogénicas.