Annabelle Lemenuel-Diot*, Barry Clinch, Aeron C. Hurt, Paul Boutry, Johann Laurent, Mathias Leddin, Stefan Frings, Jean Eric Charoin
Objetivo: Presentamos un modelo de transmisión del SARS-CoV-2 Susceptible, Expuesto, Infeccioso y Eliminado (SEIR) modificado y específico para cada país, con el objetivo de proporcionar una predicción precisa de los casos de COVID-19 para optimizar el reclutamiento para ensayos clínicos, informar estrategias de mitigación y facilitar el desarrollo rápido de medicamentos.
Métodos: Se obtuvieron datos epidemiológicos de más de 170 países del Panel de COVID-19 de la Universidad Johns Hopkins. Se incorporaron las diferencias entre países en la exposición inicial, los factores culturales y ambientales y el rigor de las estrategias de mitigación. También se tuvieron en cuenta en nuestro modelo los pacientes asintomáticos y los "superpropagadores". Las simulaciones se limitaron a un período de 2 meses considerando que los efectos de ciertos parámetros (por ejemplo, la estacionalidad de la transmisión del virus, el uso de mascarillas y el despliegue de vacunas) eran lo suficientemente ambiguos como para limitar la confianza en un período de simulación más largo.
Resultados: Utilizando estos datos, nuestro modelo estimó que el 71,5% de los casos eran asintomáticos. Sin mitigación, se estimó una tasa máxima media de infección de 1,08 casos/día (rango interpaíses, 0,68-1,65) en casos sintomáticos. A partir de aquí, se estimó que las personas sintomáticas y asintomáticas infectaron a 3,39 y 7,71 personas más, respectivamente, lo que sugiere que las personas asintomáticas podrían ser responsables del 85% de las nuevas infecciones. Se estimó que el 10,6% de los casos fueron superpropagadores con una tasa de transmisión 2,86 veces mayor que el promedio. Se estimó que se necesitaban estrategias de mitigación con un valor de índice de rigurosidad ≥ 45% para reducir la tasa de reproducción por debajo de 1 para los casos sintomáticos. Los casos simulados durante los próximos 2 meses diferían entre países, y es probable que ciertos países (por ejemplo, Argentina y Japón) experimenten una acumulación acelerada de casos.
Conclusión: En conjunto, los resultados de nuestro modelo pueden orientar la distribución de pruebas diagnósticas, influir en el desarrollo de ensayos clínicos, respaldar el desarrollo y la distribución de medicamentos e informar sobre estrategias de mitigación para reducir la propagación de la COVID-19. La gran contribución de los casos asintomáticos a la transmisión también sugiere que medidas como el uso de mascarillas, el distanciamiento social, las pruebas y la vacunación son fundamentales para frenar la propagación de la COVID-19.