Zarola F*, Profeta B
Objetivo: Se atendió a un paciente que acudía a su domicilio y que previamente había estado en consulta externa con sospecha de enfermedad de Parkinson. En su historia clínica se reportó una mala respuesta a la terapia dopaminérgica que fue suspendida por iniciativa del paciente y su familia. Por lo tanto, el objetivo inicial fue una mejor definición diagnóstica de una posible enfermedad extrapiramidal y el desarrollo de un tratamiento más efectivo.
Antecedentes: Durante las visitas domiciliarias previas se encontraron algunos signos sugestivos de un parkinsonismo como una disminución de la expresión facial y un cierto enlentecimiento motor con una ligera rigidez axial, mientras que por el camino se agregó a la observación clínica una hipotensión ortostática. Un primer nuevo intento con terapia dopaminérgica había dado poca satisfacción, pero mientras tanto emergió la presencia de episodios reportados de tipo "lipotímico". Para verificar la naturaleza de estos episodios, el paciente realizó pruebas de electroencefalograma (EEG) que mostraron signos compatibles con epilepsia.
Caso: Durante el período de observación, el paciente fue sometido a medición de presión en ortoclinostatismo, a EEG, electromiografía (EMG), análisis de sangre (dosis de B12), resonancia magnética cerebral y DAT-Scan.
Resultados: De las pruebas realizadas el paciente resultó afectado de epilepsia, caída drástica de presión en bipedestación, signos de ligera polineuropatía periférica y positividad del DAT-Scan por disminución de la captación del trazador presináptico.
Conclusión: Por lo anterior, el paciente fue sometido a terapia antiepiléptica con la que se logró una reducción de la frecuencia de los episodios de pérdida de conciencia, terapia dopaminérgica a dosis bajas, aplicación de medias elásticas e hidratación. Hasta la fecha, el paciente ha presentado una evolución de empeoramiento del cuadro clínico relacionado con la hipotensión ortostática.