Tolossa E Chaka, Girma Mulisa Misgana, Bogale W Feye y Roza T Kassa
Antecedentes: Las infecciones adquiridas en el hospital son uno de los principales problemas en los hospitales, lo que resulta no solo en un aumento de la morbilidad y la mortalidad, sino también en un aumento de los costos de la atención médica. Los dispositivos inanimados son vectores de transmisión de patógenos nosocomiales. Objetivos: Describir el papel de los teléfonos celulares en la transmisión de bacterias a las manos dominantes de los trabajadores de la salud en las salas pediátricas del Hospital Black Lion. Métodos: Se utilizó un estudio descriptivo transversal. Se incluyeron en el estudio todas las enfermeras, residentes pediátricos e internos médicos adscritos al departamento de pediatría dentro del período de estudio. Se tomaron muestras de las manos dominantes de cada participante del estudio y de sus teléfonos celulares. Resultados: El ochenta y cinco por ciento de los participantes del estudio nunca limpiaron sus teléfonos celulares. El 78% de los trabajadores de la salud usan sus teléfonos celulares mientras trabajan. De un total de 100 muestras tomadas de manos y teléfonos celulares cada uno, se aislaron bacterias en el 78% de los hisopos de manos, en el 62% de los teléfonos celulares y en el 18% de los hisopos de manos tomados después de la descontaminación. Los aislamientos bacterianos más comunes obtenidos a partir de hisopos de manos fueron Staphylococcus aureus (56,4%) y Staphylococcus coagulasa negativo (34,6%), mientras que de los hisopos de teléfonos celulares fueron de manera similar S. aureus (59,7%) y CONS (37,1%). El patrón de resistencia de S. aureus a partir de hisopos de manos fue del 24% y 44% respectivamente para vancomicina y ceftazidima; el 40% de ellos fueron resistentes a la meticilina. Conclusión: Los teléfonos celulares albergan bacterias patógenas y potencialmente patógenas que pueden transferirse a las manos dominantes de los trabajadores de la salud, lo que puede aumentar el riesgo de infección nosocomial. Por lo tanto, el lavado de manos debe realizarse estrictamente. El desinfectante de manos con alcohol es una solución si se aplica de manera correcta y constante antes y después de la atención al paciente.