Laura A Krech*, Christi Lane-Barlow, Siv Lang, Souly Phanouvong, Wei Elaine Yuan, Heng Bunkiet, Eav Dararath, Tey Sovannarith y Lukas Roth
El Ministerio de Salud de Camboya y el Departamento de Medicamentos y Alimentos han estado trabajando activamente para reducir la cantidad de medicamentos de mala calidad que circulan en el sector farmacéutico desde que se encontraron por primera vez mefloquina y artesunato falsos en 1998. Entre 2005 y 2012, se realizó una vigilancia rutinaria de la calidad de los medicamentos en establecimientos legales del sector privado y puntos de venta ilegales en doce provincias de Camboya mediante la recolección y prueba de muestras de diversos medicamentos antiinfecciosos, la mayoría de los cuales eran antipalúdicos y antibióticos. Las muestras del programa de Monitoreo de la Calidad de los Medicamentos del campo se analizaron mediante un enfoque de tres niveles que incluía pruebas de campo y de laboratorio avanzadas. Se recogieron y probaron 4.381 medicamentos entre 2005 y 2012; 106 no pasaron las pruebas de calidad, lo que resultó en una tasa general de fallas del 2,4%. 28 de las muestras fallidas (26,4%) eran falsificaciones. Los medicamentos falsificados encontrados con mayor frecuencia fueron cloroquina, artesunato, mefloquina, ampicilina y penicilina. A finales de noviembre de 2011, Camboya había cerrado más del 99% de los establecimientos farmacéuticos ilegales gracias al Comité Interministerial de Lucha contra los Medicamentos Falsificados y de Calidad Subestándar (IMC, por sus siglas en inglés). En el pasado, la falta de recursos y de coordinación entre los distintos ministerios se consideraba una barrera importante para combatir la presencia de medicamentos de mala calidad. Con el apoyo financiero de USAID, PMI y otros donantes, junto con el apoyo técnico del programa de Promoción de la Calidad de los Medicamentos de la Convención Farmacopea de los Estados Unidos, el IMC desarrolló un plan de acción para reducir significativamente el número de medicamentos de calidad subestándar y falsificados. Según los datos presentados, el plan ha logrado reducir las tasas de fallos de las muestras recogidas en Camboya de un máximo del 7,4% en 2006 a un mínimo del 0,7% en 2011. Se requerirán esfuerzos continuos para supervisar y garantizar activamente la calidad de los medicamentos en Camboya para mantener estas tasas bajas; la sostenibilidad de estos esfuerzos es fundamental.