Lizandra G. Magalhães, G. Subba Rao, Ingrid AO Soares, Fernanda R. Badocco, Wilson R. Cunha, Vanderlei Rodrigues y Govind J. Kapadia
La esquistosomiasis, una enfermedad debilitante que se remonta a tiempos antiguos, es actualmente endémica en 78 países tropicales y subtropicales, y 243 millones de personas requieren tratamiento. El tratamiento actual de la esquistosomiasis depende principalmente de un solo fármaco, el praziquantel, que es menos eficaz contra la fase larvaria del parásito y tiene potencial para el desarrollo de resistencia. Por lo tanto, existe una necesidad urgente de desarrollar nuevos fármacos antiesquistosómicos eficaces y económicos. Se sabe que los metabolitos secundarios de la naftoquinona simple (NAPQ) en las plantas actúan como fitotoxinas para prevenir ataques bacterianos, fúngicos y parasitarios. El presente estudio informa sobre la actividad antiesquistosómica de diecinueve NAPQ simples y naftoles sintéticos y derivados de plantas contra gusanos adultos de Schistosoma mansoni en condiciones in vitro . Cuatro de los compuestos probados cumplieron con el criterio in vitro del Programa Especial de Investigación y Capacitación en Enfermedades Tropicales (TDR) de la OMS para el compuesto “acertado” y líder (mortalidad del 100% de los gusanos adultos a una concentración de ≤ 5 µg/ml cuando se incubaron durante 48 h): naftazarina derivada de plantas, dos NAPQ sintéticos, 1, 4-NAPQ y 2-metil-1, 4-NAPQ (menadiona) y clorhidrato de 1-amino-2-naftol sintético. Los estudios de actividad antiesquistosómica estructural con 1, 4-NAPQ indicaron la importancia del número y la posición de los grupos hidroxilo y metilo, particularmente en las posiciones C-2, C-5 y C-8 de la molécula NAPQ original, que desempeñan un papel importante en la estabilización de la fracción quinona y la formación de especies reactivas de oxígeno esenciales para el efecto antiparasitario. Los resultados exigen más estudios in vivo sobre el potencial quimiopreventivo de la naftazarina de origen vegetal y del 1,4-NAPQ sintético, la menadiona y el 1-amino-2-naftol, todos ellos productos que han cumplido el criterio in vitro de la OMS/TDR para su consideración como principales candidatos esquistosomicidas.