Kifle Belachew, Demelash Teferi y Legese Hagos
Además de su importancia, la producción de café tiene limitaciones debido a varios factores bióticos, de los cuales las enfermedades son las principales. El café es propenso a una serie de enfermedades que atacan frutos, hojas, tallos y raíces, y reducen el rendimiento y la comercialización. Las principales enfermedades del café en Etiopía son las enfermedades de las bayas del café (Colletotrichum kahawae), la enfermedad del marchitamiento del café (Gibberella xylarioides) y la roya de las hojas del café (Himalia vestatrix); sin embargo, el resto de enfermedades se consideran menores. La plaga del café causada por Corticium koleroga es una enfermedad importante del café en la India. La plaga del café etíope se registró por primera vez en las subestaciones de investigación agrícola de Gera y Metu en 1978. Sin embargo, ocurre esporádicamente entre junio y septiembre, pero se está volviendo importante en las áreas de cultivo de café de tierras altas del suroeste de Etiopía. Se realizaron investigaciones que incluyeron encuestas de diagnóstico para evaluar la aparición, prevalencia, incidencia y gravedad de la enfermedad y la muestra se llevó al Laboratorio de Fitopatología del Centro de Investigación Agrícola de Jimma. Los resultados del estudio mostraron que el síndrome de la enfermedad en las plantas de café desprendidas era similar a la plaga del café registrada hasta ahora y observada en el campo. La enfermedad ataca invariablemente las hojas, ramas, ramitas y bayas del café con síntomas característicos de plaga. Se observaron hilos de hongos blancos en los tallos jóvenes y los tejidos tiernos de las suculentas de los árboles de café. Estos hilos eventualmente se vuelven de color marrón oscuro, crecen y se extienden para cubrir la parte inferior de las hojas, mientras que las bayas de café en las ramas infectadas también se destruyen por completo, lo que lleva al fracaso total del cultivo. El aislamiento e identificación del patógeno causal a partir de muestras de hojas, bayas, ramas y brotes produjo sistemáticamente especies de hongos que pueden ser Corticium koleroga, lo que se demostró además mediante pruebas de patogenicidad. La incidencia media de la enfermedad y la gravedad durante el primer brote (2008) en la finca de café Limmu de “ Gummer ” fue del 49,02 y el 9,8%, respectivamente. El segundo brote informado de las enfermedades fue en la finca de café Bebeka de la finca “Disadis” (2012). En 2014, se produjo un brote de la enfermedad de la tizón del hilo en las principales zonas de cultivo de café del suroeste, oeste y sur de Etiopía, con una incidencia y una gravedad medias del 58,44 y el 32,59 %, respectivamente, lo que ocasionó daños considerables. Entre otros factores climáticos, las lluvias prolongadas con un largo período de humedad favorecieron los brotes de la enfermedad, lo que implica que los escenarios actuales de cambio climático están favoreciendo enfermedades desafiantes en la producción de café arábico en Etiopía.