Jorge Olmos y J. Paniagua-Michel.
En la acuicultura de camarones y peces, el alimento representa el costo de producción más alto. La cantidad y calidad de las dietas son factores primarios que influyen en el crecimiento, el estado de salud, la prevención de enfermedades, la contaminación de los estanques y los gastos de los camarones y peces. La utilización de bacterias probióticas ha surgido como una solución con enormes aplicaciones en la industria de la alimentación acuícola. Las especies de Bacillus, principalmente B. subtilis, son una de las bacterias más investigadas para el desarrollo de probióticos animales debido a: a) versatilidad en la utilización de nutrientes para el crecimiento, b) alto nivel de producción de enzimas, c) secreción de compuestos antimicrobianos, d) productores de esporas, e) se desarrolla en condiciones aeróbicas y anaeróbicas, y f) B. subtilis es generalmente reconocido como seguro (GRAS) por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA). El desarrollo de alimentos funcionales con fuentes vegetales de nutrientes alternativos y económicos de proteínas, carbohidratos, lípidos y cepas probióticas de Bacillus subtilis, debe considerarse en los sistemas de producción de acuicultura de camarones y peces; como opción para eliminar ingredientes de los alimentos para animales, mejorar la digestión-asimilación, reducir la contaminación del agua y las enfermedades, y aumentar los rendimientos y las ganancias.