Rutuja S. Kamble*, Pandit AB
Para diseñar un biorreactor de membrana es esencial a) pretratamiento de las aguas residuales, b) comprender el comportamiento de los microorganismos en las aguas residuales a tratar, c) reducción del ensuciamiento in situ mediante el control de la intensidad de la aireación y la irradiación ultrasónica.
El presente estudio se ha llevado a cabo para estudiar el control del ensuciamiento de la membrana con un diseño de módulo de membrana y condiciones de operación adecuados (HRT=10, 12 y 15 horas, intensidad de aireación=8 L/min) utilizando aguas residuales pretratadas con un coagulante óptimo [ 1 ]. Los principales componentes de la materia orgánica en los ensuciadores de la membrana se identifican como proteínas, polisacáridos y lípidos mediante la espectroscopia infrarroja por transformada de Fourier (FTIR) de la torta de filtración recolectada.
La irradiación ultrasónica es una técnica eficaz de limpieza de membranas para biorreactores de membrana (MBR) debido a varias ventajas, como la alta capacidad de recuperación de flujo y la aplicación in situ sin interrumpir el proceso de filtración. En este trabajo, MBR equipado con membranas de ultrafiltración de fluoruro de polivinilideno de lámina plana se operaron durante 10 horas con una técnica de limpieza ultrasónica periódica que consistía en sonicación a baja potencia (15 W) con diferentes frecuencias (25, 30 y 45 kHz) y retrolavado aireado. El MBR se analizó para verificar los efectos de las ondas irradiadas en la integridad de la membrana, la calidad del efluente y el rendimiento del proceso. El mejor control de la presión transmembrana con una eliminación eficiente de la torta de filtración se logró a la frecuencia de irradiación ultrasónica de 25 kHz sin ningún efecto adverso en la integridad de la membrana.