Carmen Gloria Seguel*, Emilio Soto y José Rojas
Uno de los desafíos más importantes para la nueva economía global es encontrar nuevas fuentes de bioenergía. Debido a su eficiencia fotosintética y la posibilidad de biotransformación de sus carbohidratos en bioetanol, las algas marinas juegan un papel importante como fuente de combustible de biomasa renovable. Este trabajo tiene como objetivo, en primer lugar, evaluar Gracilaria chilensis (alga roja) como sustrato para la producción de bioetanol mediante fermentación anaeróbica con Saccharomyces cerevisiae, y luego caracterizar los subproductos de esta biotransformación. La etapa principal en la generación de subproductos sólidos es la hidrólisis con un rendimiento de alrededor del 50% p/p de peso seco. Este subproducto contiene: fibra (42,7% p/p), proteínas (39,95% p/p), carbohidratos (6,43% p/p), lípidos (5,77% p/p), cenizas (5,15% p/p) y un porcentaje de micronutrientes P >K >Ca >Mg >Na en menor cantidad que la biomasa de G. chilensis.