Gallina F, Mazza U, Tagliabue L, Sala F, Ripamonti C, Jankovic M
Objetivo: Este artículo describe una intervención multidisciplinar dedicada a pacientes con cáncer y a niños menores de edad. Es bien sabido que los hijos de padres gravemente enfermos pueden desarrollar problemas emocionales y de comportamiento. Diferentes estudios subrayan la eficacia de una comunicación abierta con los niños sobre la enfermedad de los padres para reducir el sufrimiento, pero también las dificultades de los padres para explicarlo a sus hijos. La intervención, realizada en el Hospital San Gerardo, tiene como objetivo informar o mejorar el conocimiento de los niños sobre el cáncer de sus padres y abrir la comunicación sobre el cáncer dentro de la familia.
Métodos: Esta intervención se caracteriza por la integración de un psicólogo y un hematooncólogo pediátrico y por la implicación directa de los niños. Tras las sesiones de información a los padres, el hematooncólogo pediátrico y el psicólogo se reúnen con los niños en entornos específicos, sin la presencia de los padres, para describir, con el apoyo de imágenes y metáforas, el cáncer de los padres y comprender las necesidades o los temores de los niños. En particular, el hematooncólogo pediátrico utiliza la metáfora del jardín florido para explicar a los niños la enfermedad de los padres y los tratamientos. A continuación, los médicos comparten el contenido de las sesiones anteriores con los padres. También se organizan sesiones de asesoramiento a los padres para aumentar la competencia parental y el intercambio de preocupaciones relacionadas con el cáncer en la familia. Además, se ha realizado un cuestionario específico para evaluar las condiciones psicológicas de los niños después de la intervención, el ambiente familiar y la satisfacción de los padres.
Resultados: Hasta el momento han participado en el proyecto 36 familias y 53 niños. Los resultados de los cuestionarios han puesto de relieve la ausencia de síntomas psicopatológicos en los niños, la presencia de una mayor colaboración en las familias y más posibilidades en la familia de tener una comunicación abierta sobre el cáncer. Además, la mayoría de los padres manifestaron una considerable satisfacción con la intervención.
Conclusión: El apoyo a la comunicación abierta en la familia sobre el cáncer debe reconocerse como un aspecto importante de la atención oncológica para reducir el estrés familiar.