Shu Kwun Lui, Valery Vilchez y Roberto Gedaly
El carcinoma hepatocelular (CHC) ocupa el quinto lugar como cáncer más frecuente en todo el mundo. A pesar de su alta tasa de prevalencia, las opciones terapéuticas y el pronóstico de los pacientes dependen principalmente del estadio en que se presenten. La hipótesis de las células madre cancerosas (CSC) propone que una pequeña población de células es responsable del desarrollo del tumor y la progresión de la enfermedad. Estas células se caracterizan por su capacidad de autorrenovación, diferenciación y resistencia a la quimio y la radio. La hipótesis de las CSC podría explicar la heterogeneidad del CHC dentro o entre masas, su mecanismo de recurrencia y metástasis y los malos resultados de las terapias actuales. Debido a su papel en el CHC, podría ser esencial dirigirse a estas células como parte del tratamiento. Varias vías de señalización, incluidas RAS/RAF/MAPK, Wnt-β-catenina, PI3K/mTOR, entre otras, se han implicado en la carcinogénesis del CHC y sus componentes representan nuevos objetivos terapéuticos moleculares. Debido a la heterogeneidad de estos cánceres y al complejo proceso que implica la hepatocarcinogénesis, nuestro grupo y otros sugieren que la terapia combinada debería ser esencial en el tratamiento del carcinoma hepatocelular. Esta revisión se centra en el conocimiento actual sobre las células madre del cáncer de hígado, sus implicaciones clínicas y la justificación para utilizar estas células como objetivo en el tratamiento del carcinoma hepatocelular.