Rajeeka Nadeeshani y Ranmali De Silva Kulasiri
En este informe se presenta la mala posición de una sonda nasogástrica en un paciente de 65 años con una laceración en el esófago tras la ingestión accidental de una prótesis dental. La mala posición de una sonda nasogástrica suele dar lugar a complicaciones fatales inesperadas a menos que se confirme con precisión la colocación. Sin embargo, en el caso presentado, las complicaciones pulmonares fatales se evitaron con éxito gracias a la detección y confirmación oportunas mediante la radiografía de tórax.