Nico P. Swartz
Víctor de Vita creía que la persecución vándala de los cristianos en el norte de África (429-489 d. C.) fue una visita de Dios para castigarlos por su vida inmoral y disoluta. En este contexto, el sufrimiento y la tortura son los resultados lógicos del libertinaje, que Víctor explica en términos paulinos como un medio para destruir el cuerpo humano y liberar así a la humanidad de la esclavitud del pecado. Víctor, por tanto, presenta argumentos para convencer al lector de que la tortura contiene cualidades tanto divinas como redentoras. La vida del mártir se presenta como un estímulo para que el lector pueda emular esta conducta. Los relatos de los mártires proporcionan cuatro medidas para la preservación de los valores morales en la sociedad civil. Encarnan las dimensiones éticas, ejemplares, filosóficas e inspiradoras de los relatos de los mártires en el HP. Sobre esta premisa, los relatos de los mártires en el HP deben considerarse no solo como una obra literaria, sino también como una contribución a la ética.