Allan Zeeberg Iversen, Soren Galatius, Sune Pedersen, Ulrik Abildgaard y Jan Skov Jensen
Objetivo: No está claro cuál es el momento óptimo para la administración de abciximab (en el momento inicial o en el laboratorio de cateterismo) en pacientes con infarto agudo de miocardio con elevación del segmento ST (IAMCEST) sometidos a intervención coronaria percutánea primaria (ICPp). Los datos sugieren que los pacientes con perfiles de alto riesgo son los que más se benefician del abciximab. La lesión compleja en la angiografía coronaria (CAG) implica un perfil de alto riesgo. Por lo tanto, nuestro objetivo fue investigar si el tipo de lesión (compleja/simple) predecía el efecto del abciximab en pacientes con IAMCEST sometidos a ICPp.
Métodos y resultados: Se estratificó retrospectivamente a 2.935 pacientes con STEMI tratados con pPCI según el tipo de lesión en CAG (compleja/simple) y el uso de abciximab. Los criterios de valoración al año fueron mortalidad, revascularización del vaso diana (TVR), infarto de miocardio (IM) y la combinación de estos. El cuarenta y siete por ciento tenía una lesión compleja en CAG. Entre ellos, abciximab redujo la mortalidad al año tanto en el análisis univariado (del 12,7% al 7,8%, p = 0,006) como en el análisis ajustado (HR 0,62, IC 0,42-0,91, p = 0,015). Los pacientes con lesiones simples no tuvieron ningún beneficio en la mortalidad con abciximab. El efecto de abciximab en la TVR o el IM fue neutral. Con respecto al criterio de valoración combinado, el tratamiento con abciximab confirió una reducción del riesgo en pacientes con lesiones complejas.
Conclusión: El beneficio del abciximab en pacientes con STEMI sometidos a ICP se limitó a aquellos con lesiones complejas en la CAG. En consecuencia, el tratamiento temprano con abciximab sin conocer el tipo de lesión puede no ser recomendable.