Rudolph Gruber
El diagnóstico de laboratorio de la borreliosis de Lyme se basa en la detección de anticuerpos IgG e IgM específicos contra antígenos relevantes de Borrelia burgdorferi. El diagnóstico serológico se realiza habitualmente mediante un procedimiento de dos pasos. Cuando los inmunoensayos para la detección de anticuerpos muestran una alta sensibilidad, las pruebas de segunda línea, por ejemplo, los ensayos Western-blot o line-blot, muestran una alta especificidad y se utilizan para confirmar los resultados positivos de la detección. Además de la serología, en ciertos casos Borrelia spp. se puede detectar directamente, por ejemplo en el líquido sinovial de pacientes con artritis de Lyme mediante PCR o cultivo bacteriano. Con el desarrollo de la tecnología multiplex, por ejemplo, los inmunoensayos basados en microesferas, se pueden detectar múltiples anticuerpos contra distintos antígenos bacterianos en una sola ejecución. Los sistemas de detección utilizados en este contexto, por ejemplo, los analizadores
basados en citometría de flujo, pueden estandarizarse y automatizarse en gran medida. Además, estos analizadores se pueden conectar de forma bidireccional a un sistema de información de laboratorio basado en la entrada de órdenes, con acceso aleatorio para un análisis de alto rendimiento. Por lo tanto, los ensayos con microesferas multiplexadas pueden tener el poder de reemplazar el procedimiento actual de dos pasos.