Mini Namdeo y Ankita Mathur
Los estándares ambientales más estrictos han hecho que la eliminación del arsénico del agua sea un problema importante para la ingeniería ambiental. El óxido de hierro es un sorbente particularmente interesante a considerar para esta aplicación. Sus propiedades magnéticas permiten una dispersión y recuperación relativamente rutinaria del adsorbente en aguas subterráneas o instalaciones de procesamiento industrial; además, el óxido de hierro tiene interacciones fuertes y específicas tanto con As (III) como con As (V). Finalmente, este material se puede producir con dimensiones a escala nanométrica, lo que mejora tanto su capacidad como su eliminación. El presente estudio se centra en complejos basados en óxido de hierro que se descubrió que adsorben arsénico del agua. Su composición, morfología, comportamiento magnético y potencial se estudiaron mediante espectroscopia de infrarrojos por transformada de Fourier (FTIR), difracción de rayos X (XRD), microscopía electrónica de barrido por emisión de campo (FESEM), microscopía electrónica de transmisión (TEM), potencial zeta y magnetómetro de muestreo vibratorio (VSM). Las concentraciones de arsénico se registraron mediante espectrometría de masas de plasma acoplado inductivamente (ICP-MS). Por último, también se investigaron las propiedades antimicrobianas de las partículas, que pueden utilizarse contra bacterias grampositivas y gramnegativas. El estudio sugiere que, entre los diversos sorbentes de óxido de hierro, las perlas de quitosano de magnetita proporcionan un método económico, rápido y eficaz para eliminar el arsénico del agua potable, lo que la hace apta para beber.