Kathryn L. Howe y Mark Bernstein
Con la llegada de la comunicación electrónica y el uso de la tecnología en la atención sanitaria, la privacidad del paciente se ha convertido en una preocupación cada vez mayor, ya que sopesamos la utilidad de los procesos eficientes frente a los derechos del paciente. En la raíz de todos los dilemas bioéticos se encuentran la autonomía del paciente, la beneficencia, la no maleficencia y la justicia. Los pacientes quirúrgicos deben abrirse paso a través de un sistema de atención sanitaria más complejo e íntimo en el que son especialmente vulnerables dada la exposición física, la anestesia y el diseño de concepto abierto de los entornos perioperatorios. Como resultado, todos los dominios de la privacidad requieren protección: física, psicológica, social y de la información. Aquí presentamos un escenario de caso que ilustra las posibles preocupaciones de privacidad que enfrenta un paciente quirúrgico a través de varios puntos de contacto dentro de este sistema único y analizamos la literatura en torno a lo que se sabe sobre la privacidad en estos contextos.