Manabu Inoue, Sachiyo Nagi, Evans Chadeka, Faith Mutungi, Mayuko Osada-Oka, Kenji Ono, Tetuya Oda, Michinori Tanaka, Yuriko Ozeki, Kalenda Dan Justin Yombo, Mayuko Okabe, Mamiko Niki, Yukio Hirayama, Mitsuru Fukui, Kazuo Kobayashi, Makoto Matsumoto, Masaaki Shimada, Satoshi Kaneko, Hisashi Ogura, Yoshio Ichinose, Sammy M Njenga, Shinjiro Hamano y S
La tuberculosis (TB) sigue siendo una amenaza grave para la salud humana. La mayoría de los casos de TB surgen de una infección latente por Mycobacterium tuberculosis (LTBI). Por lo tanto, la infección latente por M. tuberculosis (LTBI) es un reservorio importante del patógeno y, por lo tanto, se deben realizar todos los esfuerzos posibles para diagnosticar la LTBI y garantizar la finalización del tratamiento. La TB es endémica en la mayor parte de los trópicos, en los que también prevalecen las infecciones parasitarias. Se informó que la infección por helmintos, incluido el anquilostoma, es un riesgo de TB activa, pero se desconoce su efecto en el establecimiento de la LTBI. En este estudio, realizamos una encuesta transversal de LTBI e infecciones parasitarias entre 240 niños de escuelas situadas a lo largo de las orillas del lago Victoria en el distrito de Mbita, Kenia. Se analizaron muestras de sangre para detectar LTBI e infecciones parasitarias entéricas. Entre los 240 niños examinados, se encontró que 75 (31,3 %) tenían LTBI. De los 75 niños con tuberculosis latente, se encontró que 10 niños (13,3%) tenían huevos de anquilostomas (odds ratio: 3,02; intervalo de confianza del 95%: 1,14-7,99). Nuestro estudio sugiere por primera vez que la infección por anquilostomas está asociada no solo con la tuberculosis activa sino también con la tuberculosis latente.