Evelyn Alegría*
Las bacterias son organismos diminutos, unicelulares, generalmente de 4/100.000 de pulgada de ancho (1 μm) y algo más largos. Lo que les falta en tamaño a las bacterias lo compensan en cantidad. Una cucharadita de tierra productiva generalmente contiene entre 100 millones y 1.000 millones de bacterias. Eso es tanta masa como dos vacas por acre. Una tonelada de bacterias microscópicas puede estar activa en cada acre de tierra. Las bacterias se dividen en cuatro grupos funcionales. La mayoría son descomponedores que consumen compuestos de carbono simples, como exudados de raíces y hojarasca fresca. Mediante este proceso, las bacterias convierten la energía de la materia orgánica del suelo en formas útiles para el resto de los organismos en la red alimentaria del suelo. Varios descomponedores pueden descomponer pesticidas y contaminantes en el suelo. Los descomponedores son especialmente importantes para inmovilizar o retener nutrientes en sus células, evitando así la pérdida de nutrientes, como el nitrógeno, de la zona de las raíces.