Simone Vigneri
El sistema nervioso entérico (SNE) controla y modula diversas funciones del tracto digestivo como la motilidad, la secreción exocrina y endocrina, la microcirculación local, la inflamación y la neuroinmunidad. Este sistema es autónomo del sistema nervioso central (SNC), aunque comparten muchas neuronas y neurotransmisores. El SNC puede ejercer un papel modulador sobre el SNE a través de áreas subcorticales y del tronco encefálico, fibras periféricas y autónomas. El eje cerebro-intestino es el sistema complejo que regula las interacciones e influencias mutuas entre el sistema nervioso y el intestino. Este eje se divide en varios niveles a través de receptores, aferentes, centros de integración, eferentes y efectores, y explota múltiples mensajeros pertenecientes a los sistemas nervioso, inmunológico y endocrino. El correcto funcionamiento de este aparato es esencial en la fisiología intestinal, su participación ha sido reconocida como una de las principales bases fisiopatológicas de muchos trastornos digestivos y un objetivo para los enfoques terapéuticos actuales y futuros.