Abstracto

El origen común de todos los cánceres

Pushpam Kumar Sinha

En la actualidad, es una creencia generalizada que el cáncer se origina en células madre adultas específicas de un tejido. La mayoría de los tejidos del cuerpo humano tienen células madre adultas en su base. La diferencia entre las células madre embrionarias y las células madre adultas es que, mientras que las primeras, a través de un programa celular cuidadosamente orquestado de genes de desarrollo, pueden dar lugar a células diferenciadas terminales de todo tipo, las últimas pueden reparar el tejido diferenciado terminalmente dando lugar a células de unos pocos tipos específicos del tejido. En la mayoría de los tejidos, las células madre adultas son relativamente tranquilas y entran en acción solo cuando reciben señales de daño o lesión en el tejido. Una de las excepciones a esto es la célula madre adulta del epitelio intestinal, que está continuamente en acción a medida que las células diferenciadas del epitelio intestinal se desprenden continuamente hacia el lumen. Las células madre adultas tienen la propiedad de autorrenovarse: pueden sufrir una división celular asimétrica para dar lugar a dos células hijas distintas, una de las cuales es la copia exacta de la célula madre madre y la otra es una célula progenitora parcialmente diferenciada o progenie, y una división celular simétrica para dar lugar a dos células hijas idénticas que son réplicas exactas de las células madre madre. Las progenitoras sufren además una división celular para producir células diferenciadas terminalmente que tienen morfologías y funciones específicas. Las tasas de autorrenovación, apoptosis y diferenciación de las células madre adultas y sus células progenitoras están muy estrechamente reguladas para alcanzar la homeostasis, es decir, un estado estable en el que el número de células madre adultas, células progenitoras y células diferenciadas terminalmente alcanza un valor constante. Se ha sugerido que el cáncer es el resultado de múltiples mutaciones en las células madre adultas o células progenitoras que alteran el equilibrio entre las tasas de autorrenovación, apoptosis y diferenciación, lo que conduce a un estado inestable. Aunque las células madre adultas de distintos tejidos son diferentes entre sí, la similitud en sus destinos y propiedades tanto en condiciones normales como en condiciones cancerígenas sugiere firmemente que debe haber una génesis común de todos los cánceres, al menos de aquellos órganos que tienen células madre adultas en su linaje. A través de esta revisión investigo la posibilidad de una génesis común de todos los cánceres.

Descargo de responsabilidad: este resumen se tradujo utilizando herramientas de inteligencia artificial y aún no ha sido revisado ni verificado