Chandler L. Yunker1*, Kim A. Gorgens1, Marybeth Lehto1, Laura Meyer1, Bruce Bender2
Introducción: Las investigaciones han ilustrado los riesgos a largo plazo asociados con la lesión cerebral traumática (LCT) pediátrica y la exposición a la violencia en la infancia, incluida la disfunción cognitiva en las áreas de la función ejecutiva y la memoria. Muchas personas en el sistema de justicia penal presentan antecedentes de LCT pediátrica y exposición a la violencia infantil.
Objetivo: El presente estudio investigó las diferencias en el desempeño neurocognitivo entre individuos involucrados con la justicia con antecedentes informados de TCE pediátrico que estuvieron expuestos a la violencia durante la infancia e individuos involucrados con la justicia con antecedentes informados de TCE pediátrico que no estuvieron expuestos a la violencia durante la infancia. El objetivo de este estudio fue explorar más a fondo los riesgos de los eventos de la primera infancia sobre el funcionamiento cognitivo en la adultez.
Método: El estudio utilizó datos retrospectivos de Automated Neuropsychological Assessment Metrics. La muestra incluyó personas que estaban en libertad condicional o encarceladas (n = 280) con antecedentes de TCE informado antes de los 15 años. Se utilizó un modelo lineal jerárquico para examinar la relación entre la exposición a la violencia infantil y el rendimiento cognitivo en las mediciones de la función ejecutiva y la memoria.
Resultados: Los resultados indicaron asociaciones estadísticamente significativas entre la exposición a la violencia en la infancia y el mal funcionamiento de la memoria entre las personas que tenían antecedentes de lesión cerebral pediátrica. Es decir, las personas que estuvieron expuestas a la violencia durante la infancia y que también sufrieron una lesión cerebral traumática durante ese tiempo tuvieron un peor desempeño en las mediciones de la función de la memoria que las personas que sufrieron una lesión cerebral traumática durante la infancia pero no estuvieron expuestas a la violencia.
Conclusión: Estos hallazgos enfatizan la importancia de las iniciativas de prevención primaria al destacar el impacto aditivo de la exposición a la violencia infantil y el traumatismo craneoencefálico pediátrico en la cognición adulta en una población vulnerable. Las iniciativas de prevención secundaria dirigidas a diseñar intervenciones y programas de apoyo más propicios después de la exposición a la violencia o al traumatismo craneoencefálico pediátrico pueden ayudar a minimizar el riesgo de sufrir los peores resultados.