Yael Yaniv, Alexey E Lyashkov y Edward G Lakatta
La frecuencia cardíaca y el ritmo cardíaco están controlados por redes neuronales, químicas y hormonales caóticas y complejas que no son estrictamente regulares, sino que exhiben fluctuaciones en múltiples escalas de tiempo. Una evaluación cuidadosa de la variabilidad de la frecuencia cardíaca (VFC) ofrece pistas sobre esta complejidad. Una reducción de la VFC, específicamente en la edad avanzada, se asocia con un aumento de la morbilidad y la mortalidad. Sin embargo, los mecanismos que inducen esta disminución no se han dilucidado por completo. La literatura clásica caracteriza los cambios en la VFC como resultado de cambios en el equilibrio de las influencias competitivas de los impulsos autónomos simpáticos y parasimpáticos entregados al corazón. Sin embargo, ahora ha quedado claro que la frecuencia cardíaca y la VFC también están determinadas por las propiedades intrínsecas de las células marcapasos que componen el nódulo sinoatrial, y que estas propiedades responden a la estimulación del receptor autónomo en un modo no lineal. El hecho de que la VFC esté determinada tanto por las propiedades intrínsecas de las células marcapasos en el nódulo sinoauricular como por las influencias competitivas de las dos ramas de la entrada neuronal autónoma a las células requiere una ampliación de nuestra perspectiva sobre los mecanismos que gobiernan la VFC en el corazón normal y cómo la VFC cambia con el envejecimiento en la salud y en las enfermedades cardíacas.