Phuong-Tu D. Prowse, Tricia Nagel, Graham N. Meadows y Joanne C. Enticott
Antecedentes: Las herramientas de fidelidad al tratamiento se utilizan con frecuencia en los ensayos clínicos, lo que promueve la coherencia del tratamiento y, por lo tanto, la validez de los resultados del ensayo. Sin embargo, los procedimientos de fidelidad al tratamiento no se han incluido en las directrices internacionales de ensayos clínicos, como las Normas consolidadas para la presentación de informes de ensayos clínicos (CONSORT 2010).
Objetivo: Este estudio revisa sistemáticamente los ensayos clínicos psicológicos que incorporan procedimientos de Fidelidad al Tratamiento y evalúa su implementación utilizando la Escala de Implementación de Procedimientos de Integridad del Tratamiento (ITIPS).
Método: Utilizando la lista de verificación PRISMA como guía para la revisión sistemática, se realizó una búsqueda exhaustiva en las bases de datos Medline, PsychINFO, Ovid, Cochrane Library, Scopus y PUBMED para el período de 2004 a 2014, lo que permitió recuperar 3186 artículos potenciales. Se analizaron 32 estudios que cumplían los criterios de inclusión en relación con la escala ITIPS.
Resultados: Dieciséis estudios fueron evaluados como "apróximos a la adecuación" en la implementación de los procedimientos de fidelidad al tratamiento medidos por la escala ITIPS, ocho estudios fueron evaluados como "adecuados" mientras que otros ocho estudios fueron considerados "inadecuados" en relación con esta evaluación. Las herramientas de fidelidad al tratamiento generalmente aumentaron la intensidad de la intervención o el programa en el que se utilizaron, lo que resultó en mejores niveles de fidelidad al tratamiento.
Conclusión: La evidencia actual que respalda la inclusión de herramientas de fidelidad al tratamiento es limitada, ya que se han publicado relativamente pocos estudios que examinen la eficacia de dichas herramientas. Se recomienda realizar más investigaciones sobre la eficacia, la viabilidad y la medición de la fidelidad al tratamiento en la implementación de tratamientos, junto con la incorporación de nuevas pautas a las directrices CONSORT para respaldar mejor la inclusión de procedimientos de fidelidad al tratamiento en los ensayos clínicos.