Sudhir KM, Karthik Kumar Kanupuru, Fareed Nusrath, Srikanth Embeti, Nelagondanahalli T Chaitra
Objetivo: Evaluar el cariograma como herramienta para la predicción del riesgo de caries entre niños institucionalizados de 12 años y validarlo frente al nuevo incremento de lesiones de caries. Materiales y métodos: Se realizó un estudio de seguimiento longitudinal entre 36 niños institucionalizados. Los datos iniciales se recopilaron en el mes de enero de 2012. Los niños fueron entrevistados individualmente para registrar la información no clínica necesaria para completar el cariograma. La información clínica para la evaluación de la placa visible se registró utilizando el índice de placa de Silness y Löe y la evidencia de descalcificación y caries se registró utilizando los criterios ICDAS. Los niños se sometieron al examen de seguimiento en julio de 2013 para determinar el nuevo incremento de caries dental. Resultados: El 52,77% de los participantes fueron clasificados como de bajo riesgo y muy bajo riesgo de desarrollo futuro de caries dental, el resto de los sujetos se distribuyeron de manera bastante equitativa en los grupos de riesgo medio (19,44%) y alto (19,44%). Muy pocos (8,33%) participantes fueron clasificados en el grupo de riesgo muy alto. El odds ratio más alto para los indicadores de enfermedad fue de 4,20 para la experiencia previa de caries. El odds ratio más alto para los factores patológicos fue de 7,15 y 5,54 para la asociación de estreptococos M y placa pesada visible respectivamente. El incremento medio de caries observado desde el momento del examen inicial hasta el seguimiento fue de 0,55 ± 0,80 para la muestra total. Se pudo observar una tendencia en la que el incremento de caries aumentó con la clasificación de riesgo elevado, el incremento medio de caries fue de 1,66 ± 0,57 para riesgo muy alto, 0,85 ± 0,89 para riesgo alto, 0,71 ± 0,75 para riesgo medio y 0,27 ± 0,64 para riesgo bajo. La sensibilidad para CAMBRA fue del 47,62% con una especificidad del 80%, y el área bajo la curva ROC fue de 0,638. Conclusión: El cariograma fue válido y altamente predictivo para determinar el riesgo de caries entre niños institucionalizados.