Araya N1, Yemane D2, Andegiorgish AK3, Bahta I4 y Russom M5*
Antecedentes: Teniendo en cuenta la sobrecarga del sistema de atención sanitaria, la prescripción inadecuada, la búsqueda de automedicación y la infiltración de medicamentos de calidad inferior y falsificados en los países con recursos limitados, disponer de un sistema de farmacovigilancia que funcione correctamente es de suma importancia para garantizar la seguridad del paciente. Por tanto, el objetivo de este estudio es evaluar el grado y el patrón de difusión del sistema de farmacovigilancia y sus barreras en el sistema de atención sanitaria de Eritrea.
Métodos: Se trata de un estudio transversal exploratorio entre profesionales sanitarios de centros sanitarios representativos de todas las regiones administrativas de Eritrea. Los participantes fueron seleccionados mediante un método de muestreo aleatorio sistemático. Se utilizó un cuestionario autoadministrado asistido para la recopilación de datos entre el 27 de junio y el 8 de septiembre de 2017. Se analizó la asociación entre las variables demográficas, el conocimiento, la actitud y la práctica de la farmacovigilancia. Se consideró estadísticamente significativo un valor p bilateral < 0,05.
Resultados: Se inscribió en el estudio a un total de 390 profesionales sanitarios de 141 centros sanitarios de todo el país. El 90% de los encuestados sabe qué es la farmacovigilancia y el 89% sabe cómo notificar las reacciones adversas a medicamentos (RAM). Se observó una diferencia significativa en el conocimiento entre las categorías profesionales (p<0,001) y su nivel de educación (p=0,002). A medida que aumenta el nivel de educación, también lo hace la actitud positiva hacia la notificación de las RAM en la práctica profesional (p=0,009). Alrededor de tres cuartas partes (73%) informaron que transfieren el conocimiento de la farmacovigilancia a sus colegas. Se encontró que los médicos y farmacéuticos eran los principales actores en la difusión del sistema. La mayoría de los encuestados (72%) se encontró con pacientes con RAM y el 64% de ellos afirmó haber notificado RAM. El conocimiento inadecuado, la falta de disponibilidad de canales de notificación adecuados y la notificación y la motivación fueron las principales barreras para aquellos que no pueden notificar las reacciones adversas a medicamentos.
Conclusión: La farmacovigilancia como innovación está ampliamente adoptada y difundida en Eritrea, y los profesionales de la salud tienen un conocimiento y una práctica impresionantes en la notificación de reacciones adversas a medicamentos y otros problemas relacionados. Sin embargo, los tres principales obstáculos identificados para la notificación de reacciones adversas a medicamentos que podrían afectar negativamente el progreso del proceso de difusión fueron el conocimiento limitado sobre cómo notificar las reacciones adversas a medicamentos, la falta de canales de notificación adecuados y la motivación inadecuada.