Heena Sharma, Giriprasad R y Meena Goswami
Los animales se sacrifican para producir sus subproductos, que pueden utilizarse para diversas aplicaciones en la vida cotidiana de los seres humanos, contribuyendo así al valor de los animales. La eliminación de grasa de diversas partes del cuerpo del animal se puede realizar mediante diversos métodos, principalmente la extracción en seco y la extracción en húmedo. La técnica más ventajosa es la extracción a baja temperatura, que da como resultado el mayor rendimiento de grasa. Se realiza un procesamiento adicional de la grasa antes de su utilización en alimentos para satisfacer la demanda de uso especial y general actual. Por lo tanto, el tratamiento implica una serie de pasos de purificación, como la sedimentación y el desgomado, la neutralización, el blanqueo y, por último, la desodorización, seguida de la modificación en productos más utilizables y, por último, el envasado. El control de la calidad de la grasa es tan importante como la purificación de la grasa para aumentar su utilización entre los consumidores y aumentar el valor de los subproductos animales. Aquí se han descrito brevemente los diversos métodos analíticos utilizados para el control de calidad de la grasa, como la estimación del índice de yodo, el índice de peróxido y el índice de saponificación.